¿Dónde nace la lucha armada en los barrios? ¿Cómo se conforman los combos? ¿Qué clase de personas militan en ellos? ¿Cuáles son sus banderas, sus causas y sus inflexiones? En su libro Nuestro otro infierno: violencia y guerra en Manrique (EAFIT, 2016), el periodista Juan Camilo Castañeda recupera las voces y memorias de los habitantes del barrio Manrique Santa Inés en Medellín. Lee también una entrevista con el autor.

El libro Nuestro otro infierno: violencia y guerra en Manrique (2016) es una serie de cuatro crónicas periodísticas que, en conjunto, representan un testimonio de la vida de los habitantes del barrio Manrique Santa Inés durante la primera década de este siglo, cuando pasaron de una corta gloria esperanzadora a la zozobra a causa de las confrontaciones entre «bandas y combos».
Su autor, Juan Camilo Castañeda, es periodista de la Universidad de Antioquia. Desde el año 2015 hace parte del proyecto Hacemos Memoria, donde aborda temáticas asociadas a los derechos humanos, la paz y la memoria.
Como cuenta en esta entrevista, cuando estudiaba periodismo Camilo se interesó por entender las razones de los conflictos violentos que se vivían en su barrio. Entre los años 2009 y 2011, la guerra se libraba entre los combos conocidos como La Terraza y El Desierto. La Terraza ha pasado a la historia de Medellín como una de las facciones más grandes que militó para el narcotráfico y el paramilitarismo. Un primer enfrentamiento que revolcó la cotidianidad de Santa Inés ya había tenido como protagonista a este grupo armado, en esa ocasión contra la banda de Los Chiches, a finales de la década de los ochenta.
Según presentó el propio autor en un texto sobre su libro, en Nuestro otro infierno están las voces de los diferentes actores armados y no armados de la guerra en Santa Inés: «las víctimas, los victimarios y los habitantes que no se consideraron implicados en el conflicto local. Cada una de las narraciones establece hipótesis relacionadas con las causas de la guerra, la participación de los jóvenes en los combos y bandas, el papel del Estado en la confrontación y el funcionamiento de un orden social ilegal».
Para relatar la historia más reciente, Juan Camilo se remite a los orígenes de un barrio que nació en 1964 en terrenos de la ladera nororiental de Medellín. Allí encontraron suelo apropiado para construir su hogar obreros y amas de casa, que por aquellos días todavía conservaban las alegrías y costumbres del campo. Venían de pueblos y villas a procurar en la ciudad una promesa renovada para sus abundantes hijos y nietos.
Con un sentido vecinal de entrega solidaria colaboraron entre todos para levantar los muros de ladrillo cobrizo, echar cemento y buscar cualquier conexión eléctrica que derramara (así fuera de contrabando) algo de luz amarillenta sobre sus tejados y terrazas. Manrique creció con acciones comunales, convites y navidades bulliciosas.

De la investigación de Juan Camilo, de su experiencia personal como habitante del barrio en esos años y de su trabajo periodístico, resultaron estas crónicas, en las que, además de la suya, recoge las voces de quienes vivieron la guerra: algunos huyeron, muchos terminaron enrolados en algún bando, otros murieron en una balacera repentina, y otros más están o estuvieron en la cárcel.
El ejercicio narrativo, sin embargo, va más allá de recopilar voces. El cronista caldense, Ricardo Aricapa, resalta que este libro: «explora los contextos y motivaciones de la guerra, las lógicas e imaginarios que la nutrieron y exacerbaron. Muestra por qué para muchos jóvenes resulta casi inevitable caer en el campo gravitatorio de los combos armados y establece el contraste entre lo que ocurre en Santa Inés y demás barrios que conforman esa franja que podríamos llamar «invisible», con lo que ocurre en la otra ciudad, la «visible», la de mostrar».
En el segundo relato, Un barrio de la otra Medellín, el propio Juan Camilo convierte la crónica en su exploración periodística y su reencuentro personal –quizá reconciliación– con Santa Inés y el pasado.
Es julio de 2010. Luego de una noche de familia, un grito que llega desde la calle les avisa a todos los de la casa que Jaime, su tío, está en la clínica, víctima de una balacera en una tienda del barrio. Escribe Juan Camilo:
«Es increíble ver cómo los eventos funestos se convierten en parte de la rutina; cómo se transforman esos sonidos ensordecedores provocados por el gatillo en el cese de las llamas que representan la vida; cómo las dinámicas y protocolos del sistema de la muerte se vuelven en cuestión de segundos un evento regular en el que apenas cabe la pregunta de quién fue esta vez el desafortunado, mientras pervive la esperanza de que, ¡por Dios!, no sea alguien conocido o amado».
Estos relatos elaborados en la línea de la crónica social y enfocados en el conflicto en Medellín, llevan a preguntarse: ¿dónde nace la lucha armada en los barrios?, ¿cómo se conforman los combos?, ¿qué clase de personas militan en ellos?, ¿cuáles son sus banderas, sus causas y sus inflexiones?
Este tipo de crónica, en últimas, es un motivo para conocer a los sujetos y acercarnos a los espacios, siempre en un vínculo inseparable; luego, la relación de los hechos debe desafiar nuestras hipótesis y cuestionamientos cruciales de la condición humana.
- Lee también una entrevista con el autor a propósito de este libro.
- Lee aquí un fragmento del libro Nuestro otro infierno: violencia y guerra en Manrique, de Juan Camilo Castañeda.
- Este libro fue publicada por Editorial EAFIT (2016). En 2015 recibió el estímulo Beca a la Creación de Libro de Periodismo Narrativo de la Alcaldía de Medellín.
- Imágenes: En portada: Aerofotografías IGAC AÑO-1959-C-889. Centro de Documentación del Departamento Administrativo de Planeación de Medellín. Agradecimientos a Diego Andrés Ríos Arango. Ilustración: Catalina Vásquez.
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