Somos lo que escribimos. Imaginarios sociales presentes en los escritos de niños y jóvenes en Caquetá


¿Qué revelan nuestros escritos sobre nuestra propia vida? Desde las prácticas de escritura creativa, este texto propone un acercamiento a los imaginarios sociales de las comunidades de cuatro centros poblados de San Vicente de Caguán, Caquetá, y el círculo de lectura del municipio de Milán. Un artículo del especial Lecto-escritura para la paz en Colombia.

Por Omaira Sastoque Montalvo* [Florencia, Caquetá]

Desde hace once años, la Fundación La casita de los sueños trabaja en la gestión de espacios de formación no convencional con las comunidades de San Vicente del Caguán, Caquetá. Entre sus acciones se realizan talleres de escritura creativa dirigidos a niños, niñas, jóvenes y adultos de cuatro centros poblados de la región y un círculo de lectura en el municipio de Milán, un proyecto creado en el marco de la tercera versión de El Caguán vive la paz a través de las letras 2019

Estos talleres tienen un objetivo: fortalecer los espacios de construcción de conocimientos a través de la lectura y la escritura, hacia la creación de una cultura de paz en la región y, así, aportar a la transformación de escenarios afectados por el conflicto armado para reconstruir el tejido social. 

Aunque este objetivo ha permitido alcanzar las metas propuestas, el producto creado en los talleres de escritura generó una variable imprevista para sus organizadores y motivó una investigación, pues en la lectura de los textos creados por la comunidad se identificaron rasgos de las representaciones de los imaginarios sociales existentes.

La escritura como puente hacia la propia historia

La escritura creativa se ha convertido en un puente entre el individuo, su identidad, la memoria y el contexto. Durante este proceso de trabajo con la comunidad, se hizo un levantamiento documental de memorias, ficciones, versos, cartas, cuentos y relatos de niños, niñas, adolescentes y adultos. La población participante cruzó la brecha del silencio para expresar a través de la escritura sus pensamientos, emociones, vivencias y recuerdos que, en ciertas situaciones, se relacionaron con el conflicto armado y en otros casos con los conflictos interpersonales y familiares. 

En el año 2019, el taller de escritura creativa Escribir en el Caquetá, una catarsis de paz generó espacios de confianza como primer punto de desarrollo, exploración y expresión, para así llegar a la escritura. Los resultados obtenidos permitieron reconocer las habilidades discursivas existentes en el territorio. 

Pero, ¿qué pasa cuando la escritura se convierte en la voz de una comunidad? Este fue uno de los interrogantes nacientes en el proceso de lectura de los textos. Desde un enfoque hermenéutico, la interpretación de los textos de cada comunidad participante arrojó una serie de particulares que caracterizaron no solo los perfiles sociales sino sus imaginarios en torno a la vida: la vivida y la deseada. 

El punto de partida

Durante el desarrollo del taller Escribir en el Caquetá, una catarsis de paz, se adelantaron actividades para generar talleres de escritura creativa, dirigidos a la población de estudiantes de básica, media y comunidad en general. Los talleres buscaron despertar la sensibilización a partir de la escritura creativa, reconociendo las perspectivas emocionales existentes sobre la memoria, el territorio y la familia. 

Los talleres de escritura creativa, se ejecutaron bajo tres momentos:

1. Exploración: Partiendo del perfil de la persona, como un ser pensante y capaz de construir y aportar experiencias significativas para la sociedad desde sus habilidades y destrezas, el taller se centró en el despertar de las habilidades propias de las personas, partiendo de sus intereses, gustos, exploraciones y principalmente de los imaginarios. Con base en este primer encuentro, se identificaron los intereses creativos y las habilidades en el manejo del lenguaje escrito. 

2. La escritura: El proceso de la escritura como la continuación de la etapa de exploración, permitió a la población participante hacer tangibles las experiencias emocionales en la escritura. Respondiendo a interrogantes como:  

  • ¿Qué emoción quiero expresar? 
  • ¿Qué historias, relatos, poemas o cartas quiero escribir? 
  • ¿Cómo expreso mi historia o poema?
  • ¿A quién le quiero contar mi historia?

Este conversatorio permitió orientar desde la subjetividad un proceso de creación poético y narrativo, que llevó a la elaboración del primer borrador del texto; bajo un proceso individual y en otro momento grupal las emociones y las ideas expresadas se convirtieron en letra escrita.  

3. Creación de fanzines: En este espacio del taller se generó una introducción a la creación y divulgación de la escritura creativa en formato físico. Se realizó un proceso de reescritura y edición que permitió hacer la escritura en limpio de los textos y así crear los fanzines, publicaciones hechas a mano en formato artesanal de las obras literarias de autores.  

Gracias al desarrollo de cada uno de los espacios se fortalecieron desde el aspecto pedagógico las competencias comunicativas en el manejo del lenguaje oral y escrito, aspecto entendido desde la dimensión del lenguaje externo de Vigotsky (1995), quien afirma que “El lenguaje externo es la conversión del pensamiento en palabras, su materialización y objetivación”. En este sentido, se generaron escenarios de aprendizaje partiendo de la interiorización de los conocimientos de la literatura, la oralidad y la escritura creativa. Los niños, jóvenes y adultos experimentaron el acto de escribir al realizar la transposición de las técnicas de la escritura creativa, la recreación de imaginarios sociales y la construcción subjetiva de la voz literaria.

La formación en escritura creativa y lectura llevó a estudiantes, profesores y a la comunidad en general a ser cómplices de la promoción de una cultura letrada, pues a través de estas prácticas de lectura y escritura los individuos responden a los desafíos de la sociedad, ejercen su ciudadanía y se empoderan de su identidad de manera crítica y reflexiva (Inga y Solís, 2013). Por ello se comprendió la importancia de la escritura y la lectura para la consolidación de escenarios participativos, reflexivos, críticos y autónomos del individuo y de la comunidad, partiendo de la construcción de una cultura letrada.

Más allá del acto de escribir

Los talleres de Escribir en el Caquetá, una catarsis de paz y Herramientas pedagógicas para promoción de lectura alcanzaron un cubrimiento poblacional que gestó la inclusión pedagógica, la apertura de espacios creativos del manejo del lenguaje oral y escrito, y destacó las competencias comunicativas creativas escriturales de estudiantes con problemas disciplinarios, desconocidos para los docentes y las instituciones educativas. 

En el centro poblado de Campo Hermoso se realizaron los talleres de escritura y promoción de lectura con estudiantes con capacidades diversas. El primer caso fue el de una estudiante de preescolar, con discapacidad física y sensorial, quien, asistida por la docente de aula participó en la escucha de la lectura de los cuentos y el manejo del kamishibai. El segundo caso fue el de un estudiante del grado tercero, quien tenía una discapacidad física en sus piernas; su participación activa en las actividades del taller demostró las grandes potencialidades para el manejo del discurso oral. El último caso se presentó en el grado quinto, en el cual un estudiante con Síndrome de Down, mediante dibujos y símbolos, realizó procesos de expresión creativa propuestas como actividades de creación literaria en los talleres de formación en escritura y lectura. 

En el centro poblado de Guacamayas, uno de los estudiantes demostró a partir de la creación literaria de poemas, un gran manejo del lenguaje poético, habilidad desconocida por amigos y docentes, quienes lo destacaban como un «estudiante problema». Pero a partir de los talleres, este estudiante logró expresar cada una de sus emociones y fue así como los docentes emprendieron un acompañamiento para seguir cultivando su habilidad y creatividad.

En el centro poblado de Arenoso se logró focalizar un trabajo personalizado con un grupo de trece estudiantes, de los grados tercero hasta el grado octavo. A partir de las actividades lúdicas, teóricas y prácticas de la escritura creativa y la lectura literaria, se gestaron espacios de aprendizaje multicultural, en los cuales los más pequeños demostraron estar al nivel de los mayores. De igual forma, los mayores contribuyeron en el acompañamiento con los pequeños, permitiendo así que los talleres fueran espacios de solidaridad, compañerismo, respeto y creatividad.

En el centro poblado de Tres esquinas se creó el primer club de escritores de la fantasía. A través de sus imaginarios, dieciocho estudiantes de cuarto y quinto de primaria se comprometieron a seguir narrando las historias del pueblo y, mediante las lecturas, generar espacios de expresión literaria en la institución y en el centro poblado.

Escritura e identidad social

Mediante una lectura reflexiva del producto final de los textos, se determina que, “la narratividad se configura como un núcleo de capital importancia en el imaginario social” (Gómez, 2001). De este modo, la narración creada por la comunidad permite generar la visión que estas personas tienen del mundo, pues al escribir se evocan emociones, ideales, situaciones, recuerdos, anhelos que hacen parte fundamental del individuo y están arraigadas a su identidad. 

Las expresiones encontradas en algunos de los textos productos de los talleres de escritura creativa, evidencian una postura frente al mundo y el entorno que rodea a cada individuo: “Siempre fui la rara del salón”, escribió una estudiante del grado once en el municipio de Milán. Este inicio del primer relato nos muestra una estudiante autocalificando su ser en el entorno escolar: “La rara del salón”. Su texto fue un relato de tres páginas, escrito en primera persona en donde la autora intentó jugar con la elipsis del tiempo, fue al pasado y mostró desgarradoras escenas que parecían ser autobiográficas, sin embargo, en la literatura se juega a que lo real es fantasía y a que la fantasía es real. La estudiante, en su propiedad de autora, nos regaló a los lectores un giro especial en su relato: cambió el narrador al componer el siguiente final:

“El 14 de mayo del 2017, fue encontrada la joven Isabel Carvajal de 14 años, muerta en su habitación, murió por ingerir una gran cantidad de medicamentos. Al lado del cuerpo de la chica encontraron una carta escrita por ella, la cual relataba su trágica historia, gracias a ella pudimos dar captura a Juan Carvajal y María Pérez de Carvajal, por maltrato. Con la colaboración de Víctor, amigo de Isabel, logramos dar captura a los que abusaron de ella”. 

Sin hacer la lectura general del texto y destacando apartes del mismo, podemos reconocer una producción escrita marcada inicialmente por un individuo que está relacionado con la lectura literaria, pues juega con las situaciones narradas, pero, a su vez, hay emociones de nostalgia, olvido y rabia escritas desde una historia de abuso y descontrol. Y esto, nos lleva a preguntar: ¿es la escritura un mediador para conocer y conocernos más allá de la palabra? En busca de la respuesta, cabe mencionar el siguiente texto escrito por Manuela, de once años, en Guacamayas:

“Había una vez en Guacamayas una señora que le gustaba vender mangos para la comida de su hijo y para ella. Una tarde salió a vender mangos con su hijo y pasó su esposo y le dijo:
¿Usted porqué está vendiendo esos mangos? A usted le dije que no vendiera esos mangos, váyase para la casa.
No, yo tengo derecho a vender, porque usted no me da para la comida…

Desde una lectura crítica del texto, se pueden identificar la necesidad de aspectos formales que permitan categorizar el texto en producción literaria; la verosimilitud puede ser juzgada y no aprobada al leer las primeras líneas, pero, es necesario comprender que la escritura de los niños suele estar marcada por aquello que los rodea y trasciende la realidad gracias a la imaginación que logran producir. En Guacamayas no es habitual encontrar a una señora vendiendo mangos, pero la escritura que nos regaló la pequeña autora construye un escenario imaginario en el que se genera un discurso de dominación del hombre frente a la mujer, el cual no está alejado de los comportamientos sociales de la realidad. Sin embargo, como acto de liberación, en su pequeño nido imaginario, la autora le da fuerza y poder a la voz de la mujer, y la corta línea de discurso logra generar el significado de la lucha que muchas mujeres viven a diario: trabajar para sobrevivir junto a sus hijos, aunque esto implique ir contra la opresión autoritaria del hombre. 

Desde el imaginario de la autora se evidencian las situaciones que hacen parte del diario vivir de muchas familias. Al generar el proceso de escritura, la autora toma de manera natural las situaciones de violencia de género que se producen desde el discurso, y las convierte en su narrativa; entonces se reconoce que esta producción escrita es generada por aquello que habita en su entorno, y la única forma de transferir aquel mensaje se logra a través de la escritura. 

Por último, como rasgo predominante en los imaginarios sociales de la comunidad, se encontró el rasgo del conflicto armado. Aquí, por ejemplo, un texto compuesto por Karen, de diez años, en Guacamayas:

Oh Guacamayas qué triste estás. / Hoy te noto lleno de dolor / Por escombros y miseria que la guerra nos dejó. / El pánico estremese. / Se escucha una explosión. / Oh, que cosa tan terrible. / Lloran niños, ancianos y hasta viudas también; / porque en esta terrible guerra perdieron sus queridos seres. / Estoy en un tanque oscuro y sellado. / Donde mi corazón no deja de latir. / Mañana será un nuevo día para todos / donde en mi querido Guacamayas reine la paz para todos. 

El conflicto armado es un hecho que ha estado presente en muchos espacios del territorio caqueteño, de allí que la voz de los niños permite conocer y leer el territorio desde otra visión. Este texto escrito en verso, evocado desde un yo poético, busca de manera relevante dar voz al dolor que ha dejado la guerra en una población. No obstante, aunque el imaginario del autor recrea su comunidad en llanto y abandono, al final de la composición da un llamado de esperanza, porque ese es el último respiro que le queda al corazón: creer en que todo podrá ser mejor, así esté en un tanque oscuro y sellado.  

Con la muestra de los apartes de estos tres textos, se busca hacer una lectura de aproximación a la identificación de los imaginarios existentes en las comunidades de nuestro territorio, porque es a partir de esta lectura, que podemos comprendernos y reencontrarnos con lo que somos, aunque eso implique abrir las brechas del dolor. 

Para conocer más y apoyar el trabajo de la Fundación Casita de los Sueños en Caquetá, visita su página web: https://fundacioncasitasuenos.org.

*Omaira Sastoque Montalvo nació en Florencia, Caquetá en el año de 1993. Es Licenciada en Lengua Castellana y Literatura de la Universidad de la Amazonia. Se ha desempeñado laboralmente como formadora y promotora de escritura creativa y lectura en diferentes espacios de la región del Caquetá. Escribió para la antología nacional de Relata 2016, y participó en la primera versión de formación del programa de Literatura para jóvenes escritores, de la British Council Colombia 2015 y 2016. Actualmente lidera la plataforma digital de promoción de literatura y cultura llamada Cultura Jacana

Referencias en el texto

Gómez, P. A. (2001). «Imaginarios sociales y análisis semiótico. Una aproximación a la construcción narrativa de la realidad». En: Cuadernos de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales-Universidad Nacional de Jujuy, (17). Disponible en https://www.redalyc.org/pdf/185/18501713.pdf 

Inga, E. C. M., y Solís, E. H. C. (2013). «Leer y escribir… más allá de la escuela. Horizonte de la Ciencia«, 3(4), 67-70. Disponible en http://revistas.uncp.edu.pe/index.php/horizontedelaciencia/article/view/62

Vigosky, L, S.(1995). Pensamiento y lenguaje. Teoría del desarrollo cultural de las funciones psíquicas. Ediciones Fausto. Disponible en:  http://abacoenred.com/wp-content/uploads/2015/10/Pensamiento-y-Lenguaje-Vigotsky-Lev.pdf

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